Zamora es la cuna del traje típico más artesano de España.
Bordados Carbajalinos
Cuenta la leyenda que las costureras «La Guardesa» y «La Corrales» fueron
las creadoras de la Rosa Picada que en 1985 obtuvo el primer premio del
I Festival Folclórico Mundial de Baviera en Alemania
El Bordado Carbajalino cuyos orígenes se pierden más allá del siglo XVI ha logrado situar a su Traje Típico de Mujer como la indumentaria más artesana y colorida de España, obteniendo el Máximo Galardón dentro del «Primer Festival Foiciórico Mundial de Baviera 1985» celebrado en Alemania. El mejor paño de la salmantina Bejar, las doradas lentejuelas catalanas de Barcelona y los zapatos de Valencia adquieren vida para ser lucidos luego por la Virgen de Arboles, una agricultora de Domez o la primera dama de Chile. La indumentaria femenina viene a alcanzar, con Mantilla, unos 2900 euros.
La Villa de Carbajales de Alba se ha convertido por méritos propios en la cuna del Traje Típico de Bordado Artesanal más importante del Mundo. Las más exigentes damas y caballeros de los cinco continentes, Europa, África, América, Asía y Oceanía, se han ido rindiendo poco a poco ante una indumentaria, sin lugar a dudas inigualable, llena de mística, colorido y brillantez, hecha puntada a puntada, por las ágiles manos y las mentes despiertas de unas gentes dispuestas a cultivar y mantener los valores de su amada tierra.
Sus orígenes se pierden en la noche de los tiempos y de su existencia e historia , aunque pocas, ya tienen citas en el siglo XVI.
Cuenta una leyenda pasada de padres a hijos en los pueblos del antiguo Condado de Alba de Aliste, que las
más importantes, famosas y primitivas costureras fueron dos carbajalinas de pura cepa "La Guardesa" y "La Corrales" creadoras ellas tal vez de la Rosa Picada y Estampada al casarse las dos mozas más ricas de la Villa. Una copla popular las define "El traje de Carlinda / costó cien reales / que pagaron los duques / a la Corrales / y el de Teresa / primoroso en colores / a la Guardesa".
más importantes, famosas y primitivas costureras fueron dos carbajalinas de pura cepa "La Guardesa" y "La Corrales" creadoras ellas tal vez de la Rosa Picada y Estampada al casarse las dos mozas más ricas de la Villa. Una copla popular las define "El traje de Carlinda / costó cien reales / que pagaron los duques / a la Corrales / y el de Teresa / primoroso en colores / a la Guardesa".
La Virgen de Arboles ha sido una de las grandes embajadoras del Bordado Carbajalino luciendo con elegancia su propio traje cada día 8 de septiembre en la procesión junto a devotos y feligreses.
El último Traje Carbajalino salido del Taller de Bordados, en el mes de junio, fue realizado por una vecina de Domez de Alba: Consuelo Gabella. La señora es una de las grandes amantes. del Folclore y Raíces de los Pueblos. Ella es dueña de los mejores garañones y burras de la raza asnal autóctona Zamorano-Leonesa y en sus ratos libres forma parte con sus hijos de un grupo de gaiteros y dulzaineros.
El precio del traje completo ronda los 1700 euros y la Mantilla, como complemento, los 1200 euros. La vestimenta de auténtico lujo tiene la característica de realzar la figura y la belleza de la mujer.
El precio del traje completo ronda los 1700 euros y la Mantilla, como complemento, los 1200 euros. La vestimenta de auténtico lujo tiene la característica de realzar la figura y la belleza de la mujer.
Sección Femenina
El «Taller de Recopilación Artística de Carbajales» fue creado por Jacinto Alcantará bajo los auspicios de Auxilio Social en 1940
En el año 1928 la Escuela de la Cerámica de Madrid, dirigida por Jacinto Alcántara, casualidades de la vida, decidía iniciar sus Cursos de Verano en Sejas de Aliste. Sus profe- sores y alumnos nos dejaron una visión acertada y colorista de la Indumentaria Alistana. Famosas y apreciadas son las acuarelas de artistas como Ricardo Segundo o Manuel Mora. Por su parte Anlecto García Villar e Isabel Irucia, entre otros, reflejaron la vestimenta carbajalina dos años más tarde: en 1930: meses de verano.
Las visitas estivales continuaron en años sucesivos y así termino en Alba, el infatigable Jacinto, que con el objetivo de recuperar e iinpulsar el Bordado de Artesanía crea el Taller de Recopilación Artística (Taller de Bordados) bajo los auspicios de Auxilio Social en 1937. Estaban en plena Guerra Civil (1936 / 1939). Simultáneamente se crearon dos subsedes, una en la propia Sejas y otra en Tábara.
El Primer Taller de Bordados de la Provincia de Zamora tuvo como inicio el requisamiento de dos maquinas para poder hacer los trabajos, siendo nom- brada como Directora la joven Manuela Gómez Prada, nacida en Carbajales en 1912 y que por aquel entonces contaba unos 24 años de edad.
Inicialmente el trabajo se ciñó al Traje Típico, siendo el mayor problema la escasez de los materiales, por lo cual se buscaron otras alternativas como hacer alfombras, delantales o tapices. En plena contienda bélica no eran muchas mujeres las dedicadas entonces al bordado, por lo cual se abrió el Taller de «Don Jacinto» con doce mozas aunque luego se llegó a las catorce. Era época de estrecheces económicas, de sufrimiento en el Frente, por lo cual cada bordadora comenzó cobrando únicamente 3 pesetas diarias.ocasión el entonces Gobernador Civil, Carlos Pinilla Touriño, hombre fuerte del Régime en Zamora, clausuró el taller en un intento porque fuese explotado sólo por gente de la provincia. Tras comunicárselo a Auxilio Social, al frente del evento estaba Mercedes Sánz Bachiller (mujer del prestigioso político Onéximo Redondo), en sólo dos días vino una orden permitiendo su reapertura.
Arte en la Calle del Oro
Llegó la Paz al país y España se enfrentaba a años de miseria. Una de las primeras iniciativas tras terminar la Guerra Civil fue la construcción en la Calle del Oro del actual Taller de Bordados, Cesáreo Carbajo Celada,. y el apoyo de Carlos Pinilla. La financiación de las obras corrió a cargo de los vecinos y pueblos de la Tierra de Alba: Carbajales, Losacio, Muga, Santa Eufemia, Vegalatrave, Manzanal, Losilla, Losacio, Videmala, El Castillo y Vide.
Como Directora fue nombrada Manuela Llamas Pérez, más conocida a lo
largo de su vida por familiares, amigos y vecinos como "Emma"; nacida en 1915, contaba con 26 años. Fue tal su auge que en los comienzos llegaron a trabajar hasta 50 mujeres.
Frente al pequeño edificio del Taller Viejo el Taller Nuevo, inmueble con zonas ajardinadas que hace esquina con las travesías de las carreteras Zamora - Mahide y Carbajales - Santa Eufemia, contaba con amplios espacios e incluso calefacción y una cómoda cocina.
La gestión del nuevo Taller de Bordados fue encomendada en esta ocasión a la Sección Femenina
Aún hoy viven algunas de aquellas jóvenes y recuerdan con
nostalgia y gracia sus inicios: "Nos cogían al salir de la
escuela, con 14 ó 14 años, y entrábamos como
aprendices, sin cobrar nada. Cuando gracias a la práctica
ya sabíamos algo, pasábamos a trabajar en los bastidores
con un sueldo de cuatro pesetas y dos reales al día. No
estaba mal si tenemos en cuenta que las profesionales
recibían seis pesetas".
Los dos centros de artesanía funcionaron a la vez, sin problemas, aproximadamente durante 19 años, desde 1941 hasta 1960. Individualmente el Taller de "Don Jacinto" sobrevivió desde 1937 a 1960: 23 años; el "Taller de Bordados" desde 1941 hasta el 1 de Enero de 1986,fecha en que se decidió su cierre, tras 45 años de vida.
Tras 6 años en el olvido, el 3 de junio de 1991, el "Taller de Bordados" de la Calle del Oro abría de nuevo sus puertas gracias a la iniciativa del entonces sacerdote de Carbajales, Cesáreo Carbajo Celada, natural él de Perilla de Castro, que fue el alma máter y el artífice de la puesta en marcha de la Asociación "Bordados Artesanos Carbajalino" a la que la Junta de Castilla y León arrendó el edificio. Desde entonces, siete mujeres artesanas de pura cepa mantienen viva la tradición del bordado manual. Ellas son Remedios, Maruja, Josefa, Lura, Maria Jesús, Antonia y Soledad.
El Manteo que mide 3,20 metros es de paño de Bejar y su bordado lleva 960 horas de trabajo a los costureras
Las mujeres integrantes de la Asociación de «Bordados Artesanales Carbajalinos»han garantizado durante los últimos años la pervivencia delTraje Típico trabajando, sin prisa peroin pausa, cuatro horas diarias, de 4 a 8 de la tarde, de lunes a sábado. En la villa existen varias mujeres más que realizan los bordados en sus casas. En todos los casos siempre se trabaja por encargo Trajes, Mantillas, Faldas de Camilla, Cogines, Corbatas Bordadas, Capas Españolas, Mantos para Vírgenes y Santas, Muiíecas Albarinas y Reposteros, con todo se atreven lasartesanos de Carbajales. En colores sobresalen siempre el Rojo, Verde, Dorado, Pajizo (amarillo), Rosa, Azul y Morado «porque son los más preciados, vigorosos y lucidos».El envejecimiento de la población ha traído consigo la desaparición de otros oficios artesanales como el Cultivo del Lino elHilado de la Lana o los Telares Artesanos. Ello ha llevado a tener que conseguir las materiasprimas en otras lejanas tierras. Los paiíos llegan de la población salmantina de Bejar y las lentejuelas de la catalana Barcelona. Tampoco quedan zapateros y los zapatos son realizados en Valencia.